REFORESTACION LOMAS DE PARAISO
Domingo 09 de Junio 2024
Una mañana húmeda, después de haber llovido en la zona de Lima sur, nos habíamos citado a las 8.30am, varios voluntarios estaban ya desde las 8.10am. Algunos confundieron la estación María Auxiliadora por la estación Villa María, pero allí estaba nuestra amiga Natalia, para rescatarlos.
Dos días antes habíamos llevado los arboles y el abono, aprovechando el feriado del día viernes; muy temprano por la mañana, desde el vivero de don Pablo Encinas en Pachacamac, hasta el Asentamiento Humano Quebrada Alta de Paraíso; uno de los bastiones de la conservación de las Lomas en esta zona de Villa María, contra invasores, alcaldes impulsores de invasiones y otros. Ese día estuvo soleado, distinto a lo que nos esperaría el día de la reforestación, un día muy húmedo y lluvioso. Un voluntario me pregunto si esta zona era la denominada "Ticlio Chico".
Domingo 09 de Junio . El día de la reforestación
Estuvimos desde muy temprano en la estación María Auxiliadora, la hora de encuentro era a las 8.30am, un primer grupo salió de la estación cerca de las 8.45am, el segundo grupo salimos cerca de las 9.00am. Éramos cerca de 40 voluntarios para la reforestación, apoyados por 3 guías de la zona quienes Tomamos una combi que nos dejo a la altura del mercado Flor de Amancae, apodado "Metro, Tottus, Vivanda"; de allí iniciamos la caminata hacia el asentamiento humano Quebrada Alta de Paraíso, a 3 cuadra de distancia, caminando primero por una calle corta pero empinada, donde nos sorprendimos como bajaba una moto casi a 80° de pendiente ofreciéndonos tamales; para luego seguir por una ladera de cerro, por encima del mercadito mencionado, evitando así los caminos y escaleras con perros que nos molestaran, a 1 cuadra mas estaba el asentamiento humano Quebrada Alta, donde los vecinos estaban en una faena para construir una pirca, así ampliar la pista de acceso y asegurar que las lluvias y la humedad no erosionen el suelo, socavando su acceso al asentamiento humano.
Nos recibió el señor Gerónimo Huayhua, quien dejo por un rato la faena, para darnos unas palabras de bienvenida, donde nos conto sobre todos los avatares de años para proteger estas lomas, y el poco apoyo de las autoridades y la nula inversión en estos espacios hoy en día por parte de quienes deben invertir en la población, infraestructura y sus espacio verdes.
Luego de realizar una explicación de como reforestar, tomamos los arboles, el abono y las herramientas para empezar a subir, un tramo corto encima del asentamiento humano, donde hay una zona de reforestación de muchos años, donde puedes encontrar taras reforestados, además de tanques de agua y mangueras de un sistema de riego tecnificado que se ampliara.
Al inicio los voluntarios un poco temerosos por lo empinado del terreno, pero luego asimilaron el espacio, y perdieron el miedo a trabajar , tomando sus herramientas, y ayudándose mutuamente a hacer los huecos, llevar los arboles, el abono, compartir herramientas, buscar los espacios donde sembrar, además de traer agua para los arboles. Esta ocasión fueron 40 huarangos que se reforestaron.
La reforestación culmino cerca de las 12 del medio día, el día seguía frio, ya no tanto como temprano en la mañana, decidimos bajar para despedirnos y dar las gracias a todos por el apoyo. Ya no hubo ganas de visitar las pinturas rupestres, la mayoría estaban algo cansados y con frio.
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